martes, abril 25, 2006

Semana Santa



Estoy sola, me gusta mucho estar sola; de nuevo Semana Santa, los ritos, la memoria...
Pensaba en los ritos precisamente, en los recuerdos infantiles, el Domingo de Ramos baño en el balde, el sol atravesando el cristal, la estufa, el momento más temido: el de estrenar las espantosas camisetas y bragas de perlé, ¡inevitable penitencia pascual que te dejaba la piel a bolitos!.
Cuando fui un poco más mayor la ceremonia del ajuste de la goma de la mantilla, la misa de diez en el colegio, el coro.
La Palma de Ramos suscitaba controversia familiar, que si te la compró yo, que si te la regalan tus padrinos, pocas golosinas que os ponéis perdidas. A mi el Domingo de Ramos nunca me gustó, me parecía una celebración insustancial e incomprensible. Había que estrenar algo, aunque fueran unas bragas, nunca entendí que relación podía tener estrenar bragas (de perlé) y la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén
Vivencias juveniles como una inolvidable vigilia de Pascua de Resurrección en Alsasua ó una Semana Santa de acampada en Biescas ó la que pasé en el Igueldo cuando fuimos a ver a los Clash, ó la que pasamos con las niñas en una granja en Ávila.
Como espectáculo me impresionaron los oficios de Jueves Santo que pude contemplar en Sígena, el ritual del lavado de pies a la comunidad de monjas de clausura, igual fueron imaginaciones mías, pero se respiraba una mística formal y sensual a la vez, los olores, el ceremonial, las velas, los cánticos, el convento
De adulta no entiendo que el día más importante de la Semana Santa sea el que matan a Dios, esto da pistas del palo que va la iglesia; una religión positivista priorizaría el día en que su Dios resucita y vence la muerte, no el día que lo matan.
La iglesia a lo largo de los tiempos viene ejerciendo una influencia que inclina al individuo a una actitud de sometimiento, juega con la ambigüedad sublimando algunos conceptos, utiliza un lenguaje metafórico y lo inviste de valores opuestos a su significado.
Es increíble como somos los humanos, una religión sientas unas normas dice que son incuestionables (lo llaman dogmas), aunque sean humanamente increíbles a la luz del conocimiento y millones de personas lo aceptan, solo nos disculpa el enorme lastre de siglos que arrastramos, al fin y al cabo los hombres somos animales de costumbres.

Besitos místicos. Muaohhhhhhhhhmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm.

sábado, abril 15, 2006

Tinieblas provincianas

Aborrezco la imbecilidad y me aborrezco a mi misma de que me aborrezca, o sea que estoy pelín irritada con el mundo y conmigo.
Pues, o sea, que ayer estuve en la Procesión y sí estuvo muy bien.

Los oscenses ateos o agnósticos de pro, emocionados al contemplar los pasos y el fervor procesional de sus conciudadanos, unidos anímicamente como “un solo pueblo (huesqueta)”
El bar semivacío, al fondo una TV retransmitiendo el Barça-Villarreal; en la entrada, en alto y frente a la barra otra TV retransmite en directo la provinciana (aunque muy dignificada ), Procesión.
En ese ángulo de la barra nos encontramos el diezmado sector republicano, bebiendo verdes con ligereza, hasta que descubrimos que estábamos sobre el motor de la refrigeración que desprendía un calor excesivo.
El ambiente no fue tan colorido como en otras ocasiones y eso que ayer la fecha tenía un significado especial, era el 75 aniversario de la 1ª y Gloriosa Republica de éste estúpido país.
Bueno, brindamos con “Salud y Republica”, lanzamos unos cuantos “Viva la 3ª Republica”, una colegui se arrancó con unas cuantas saetas bordes, no hubo consecuencias. Rompimos la tradición transgresora y no comimos longaniza en la Asociación de Vecinos.
El marujeo me socarra, burneouth, no se si se escribe así, si alguien lo sabe que me corrija. A veces no puedo con la parafernalia provinciana, reconozco que me pasa más en primavera
Detesto los grupitos por sexos. Ellos no hablan de ellos, pero las conversaciones o son en tono de broma o sobre un tema concreto Ellas no hablan de ellas, de sus sentimientos, de sus reacciones, no, echan fuera sus miedos hurgando, inventando o dejando en el aire las imaginadas vidas de otros.
Cada una de nosotras- os, (me voy a incluir en ellas esta vez), tiene suficiente historia personal para reflexionar sobre quien es ella frente al mundo, frente a sus relaciones; como las tiene y como las quiere, reconocer que el único patrón para aspirar a la felicidad es la sinceridad descarnada con uno mismo.
Daré un par de pistas, plantearnos nuestra relación de pareja: como es y como querríamos que fuera, poder hablarlo sinceramente con la persona interesada.
Si nos va el Heavy podemos revisar nuestro concepto de amistad y como lo aplicamos en las relaciones con nuestros amigos, sus matices. Quienes son nuestros amigos, diferentes tipos de amistad, que importancia tiene en nuestra vida, ya digo, para heavys.
Otra cosa que me pasa en Semana Santa es que me da por pensar o reflexionar mas de lo habitual, me reconcentra un poco.
Observo más a mis congéneres en este tiempo, me pasa desde siempre. Sentada en una banqueta (imprescindible) miro o escucho; me gusta captar conversaciones o gestos ajenos que no me importan, escucho con la distancia del espectador de teatro, a veces oigo un trozo, desconecto e imagino una historia, eso me divierte bastante.
Las tardes de esta época del año a veces se dilatan, se expanden, son como difuminadas, la luz alarga la sensación. Es posible que la coincidencia de la luna llena de forma invariable en estas fechas y el cambio atmosférico de presiones sean los causantes de esto o quizá se deba a que ayer mataron a dios y el mundo esta tres días sin él, tres días en los que reinan las tinieblas. Continuaré con la penitencia hasta alcanzar el gozo como recompensa o el éxtasis por sublimación
Besos tenebrosos y recogidos, me he desahogado.



jueves, abril 13, 2006

Esta Primavera


El descarado sol de primavera entra por la ventana del pasillo, una suave brisa hace ondear el visillo de muselina; el ligero tejido danza sinuosa y arrítmicamente, moviéndose en una atmósfera propia e ingrávida, desvinculada de su entorno, como si fuera el protagonista de una ilusoria opera moderna.
Es preciosa esa vista cuando se entra en casa en un día de Primavera. Habitualmente dejo esa ventana abierta porque adoro que entre el olor de la estación, claro que también entran los olores de las cocinas vecinales en las horas punta.
La convivencia esta llena de pequeñas inconvenientes y servidumbres de este tipo, ¡que se le va a hacer!, solo se puede intentar capearlas con estrategia operativa y sentido del humor.
Se están empezando a colocar los elementos de mi vida y mis circunstancias en su sitio.
Necesito apertura de mente y de corazón, en este sentido intento hacer toda la gimnasia que puedo, ciertamente la Primavera y las endorfinas me ayudan mucho para lograr esta actitud y este sentimiento
Ahora me toca ser espectadora, me tocaron blancas e inicié el juego, estamos jugando unas partidas simultaneas en las que desearía quedar en tablas con mis dos compañeros de tablero. Son los hombres de mi vida, forever. No sé cómo en le futuro, pero si sé que será forever, los matices los pondrá el tiempo, como siempre..
Ellos no me hacen caso cuando les digo que hagan algo manual, es algo que algunas personas no contemplan en toda la amplitud de su poder y utilidad, para ellas las manos son algo al final del brazo que sirve para....
Les suena a chaladura mística cuando les digo que el trabajo manual construye esquemas mentales. Claro que igual les doy esa imagen porque cuando lo sugerí acababa de conocer los principios Herméticos y sucede que cuando me abro a nuevos conocimientos y creo entenderlos, me posee un éxtasis intelecto-emocional, que me hace relacionar todas las cosas que bullen a mi alrededor bajo la luz de los nuevos conocimientos.
Seguramente les soltaría como argumento para alentarles a la manualidad algo así como “¡Claro, Como es arriba es Abajo! o “Toda causa tiene su efecto y todo efecto tiene su causa”. No me doy cuenta, permanezco un tiempo en otra dimensión, aparentemente mi vida continua su anárquica rutina, pero los conocimientos y sensaciones se van posando. Se filtran y posan, actúan con plena autonomía.
En el terreno perceptivo-sensorial, sufro una alteración del estado de conciencia compatible con lo cotidiano. Un acolchamiento que me conduce a una disposición benevolente.
Las personas somos estúpidas necesitamos atarnos siempre a algo, hasta a lo que no existe. Dicen los Físicos que ni el espacio ni el tiempo existen, que es una unidad, lineal y continua, pero, pero pero....¡como somos!, vamos y nos inventamos unas coordenadas secuenciales (espacio y tiempo) para constatar nuestra perdurabilidad, para medirnos, para controlarnos y para permitir que nos controlen otros al amparo absolutista del dios Tiempo.
La verdad es que esta Primavera me está sentando muy bien.
Besitos floridos

Viaje al sur


Ha tenido que hacer una triquiñuela para coger el autobús, un golpe audaz de los que ocasionalmente se enorgullece, chasquido de dedos y... resuelto, le dice al taxista que le lleve al pueblo próximo en lugar de a la estación de autobuses.
Desearía que esa determinación y ¿por qué no? clarividencia, que se le apodera puntualmente ante pequeños inconvenientes, se hiciera mas frecuente y extensiva a otras áreas de su vida.
Le espera un viaje largo y pesado, las pequeñas incomodidades en los viajes le hacen recordarlos de forma más vivida. Este es un viaje incómodo en algunos sentidos, pero con un destino estupendo: huir temporalmente hacia el sur.
El sur, ese sur que intuitivamente le inspiraba la libertad, presentía que su aire era diferente y se respiraba diferente al del resto del mundo. Se ve paseando en sus playas interminables, los pies descalzos en la arena mojada, el salitre...
También va a constatar un imposible y a disfrutar de un sueño, está intranquilo.
Se acomoda en el autobús, busca unos caramelos y el walkman, un poco de música relajante New Age.
Dormitará tres horas hasta la capital, también lleva un libro que está acabando, desde que le conoce es el tercero que lée. Es curioso, piensa, su primer amor se empeñó en que leyera y no lo consiguió en 20 años y este lo ha conseguido sin saber él cómo.
En la capital hará transbordo y cogerá otro autobús que le llevará a la ciudad de Boabdil el Chico, allí estará él esperándole, con su coche pequeño, con su carita lánguida y triste, con los ojos brillantes del naufrago que cree ver un bote en el horizonte.
Se relaja, intentará prepararse para recibir el espíritu de libertad de los aires del sur, intentará disfrutar y vivir una historia bonita.
Hablar con ella le hace bien, reflexionan juntos. Esta relación que había vivido como asfixiante y destructiva, a la que achacaba su malestar interno y su permanente insatisfacción, falta de valoración y muchas más cosas, se ha transformado en algo enriquecedor y benéfico, se atreve a decirle cosas que no osaría verbalizar ni ante si mismo, ella las saca a la conversación naturalmente, con claridad, a veces sin caridad, ella es así.
Ayer hablaron del futuro próximo, él le dijo que necesitaba distanciarse; ella le preguntó:

- ¿el sur?
Y el dijo:
no, un pueblito de interior.
-¿te vas a hacer anacoreta?.

Es inverosímil, no solo, como ella le entiende, sino como sintetiza en pocas palabras todo un proceso. Anacoreta, fue la clave.
Ella sabía que él ante su situación se hundió en su fango, en su autocompasión, en la fatalidad negra de su existencia, en sus sensaciones de desamor, de menosprecio, de minusvalía emocional, y como consecuencia pensó en suicidarse como la única solución posible, la más digna o por lo menos la más romántica, como le diría ella con sorna.
No llegó a expresarlo, ella lo hizo por él, le dijo

no se te ocurra suicidarte que las niñas no cobrarían el seguro-
Días mas tarde, cuando vio que su historia era una más en la complicada sociedad en que vivimos, la idealizada solución suicida se fue desvaneciendo de su cabeza, paralelamente, una necesidad imperiosa de aclararse, de saber quien era realmente frente a si mismo, se instaló obsesivamente en él
De nuevo ella fue quien le dijo

Necesitas distanciarte, la distancia y la soledad elegida son buenos consejeros.-
Sabe que ella ha resumido todo su proceso en la pregunta sabiendo ya la respuesta ¿te vas a hacer anacoreta?
Este viaje al sur es como una iniciación para su autoconocimiento; cuando regrese buscará un pueblo en el interior, a medio camino de todas partes. Unos meses de vida cartuja, lejos de su vida, lejos de todo, le ayudarán a serenarse, la harán bien. Debe decidir su próxima partida, su siguiente viaje.